Javier Corral se queja que la atención que le presta el periódico El Universal a sus desatinos y fallas de gobierno, porque según él responde a la cancelación de pautas publicitarias.
Sobre el tema hay una gran discusión. El gobierno está obligado a difundir diversas obligaciones en los medios de comunicación, así como difundir las acciones que toma, aquí debe incluir sus evaluaciones para que los medios puedan informarle a la sociedad. Y si determina una partida para comunicación debe establecer una política para crear una pauta de comunicación, sin obligar a los medios a establecer un discurso específico: las loas al gobierno o al gobernador por ejemplo.
Corral decidió abrir su periodiquito y asignó el contrato de impresión sin concurso, lo que es ilegal, mientras que gente de los medios sostiene que nadie lo lee.
Lo que llama la atención es que otros medios no le presten tanta atención a los desfiguros y desaciertos de Corral. ¿Acaso a ellos si les dio pauta de publicidad?
Las preguntas de El Universal son válidas y Corral tiene que responder. Debe demostrar que el viaje a Mazatlán costó $40,000 y que él lo pagó. Y si dará cuentas, de paso que explique de dónde salió el dinero para comprar varias casas y terrenos, incluido el que le quitó Televisa por mañoso y negarse a pagar.
Hasta ahora la gente percibe un fracaso en el gobierno, acompañado del intento de concentrar poder y ponerse por encima de los poderes legislativo y judicial. Las viejas mañas del PRI por medio del que se dice reformador.