Xochitl Patricia Campos López
El resultado del veredicto en el juicio contra Genaro García Luna en los Estados Unidos de Norteamérica, desde la perspectiva de María Amparo Casar, es una vergüenza para México, y quizá por ello es fundamental la autocrítica. Por eso el mensaje de la vergüenza, implícitamente tenía un destinatario en Carlos Loret de Mola -cercano colaborador de García Luna- así como en el equipo del presidente Felipe Calderón Hinojosa y Vicente Fox; donde la politóloga representante del Instituto de Mexicanos Contra la Corrupción (IMCO) también desempeñó tareas de Estado. México es la Sicilia Norteamericana, la nación criminal donde se agoniza el Estado como lo querían los tecnócratas neoconservadores.
El neoliberalismo fue un narco gobierno de cabo a rabo, desde el sexenio de Miguel de la Madrid Hurtado hasta Enrique Peña Nieto no cabe duda de que la economía de las drogas penetró el tuétano de México. ¿Podrá decirse algún día que el narco gobierno inició y acabó con los juicios más significativos a la clase política mexicana en Estados Unidos? El neoliberalismo volvió a México un régimen de corrupción plena, de ahí que la claridad en la conducta de Genaro García Luna ahora termine por deslumbrarnos.
Así como la transformación del neoliberalismo ha sido degenerativa, la percepción política de las facciones, institutos, grupos empresariales y tendencias religiosas que se nutrieron del proceso, comienza a tener una percepción social demasiado negativa. Felipe Calderón está alineándose con los peores presidentes mexicanos. La conveniencia política de los grupos de la coalición PRIANRD-Empresarios-Iglesia Católica, ha quedado derrotada desde el enfoque de la Casa Blanca. Genaro García Luna fue juzgado junto con quienes consideraron el gobierno neoliberal como la única opción para modernizar política y económicamente este país.
Pero junto con México también fueron juzgados los Estados Unidos de Norteamérica. Es cierto que García Luna fue Secretario de Estado al más alto nivel de la administración pública federal de nuestro país, pero también estrecho colaborador del gobierno de Estados -y probablemente- miembro de sus agencias inteligentes. Luego entonces, el delito o los delitos, también afectarán -o deberían afectar- a los funcionarios del gobierno norteamericano. Evidentemente esto no será así, los Estados Unidos y su Pax Americana nunca van a reconocer que el narcotráfico es la caja chica de su geopolítica.
¿En qué habrán cambiado los intereses territoriales de Norteamérica para abandonar a los neoliberales? La entrega de personajes como García Luna constituye un impacto profundo en esta derecha polipartidista y pragmática. Probablemente las cosas cambien en poco tiempo, con los Estados Unidos nadie puede estar seguro. La situación del cardenismo constituye un símil para comprender el lopezobradorismo.
La situación geopolítica de los años treinta del siglo pasado, obligó a Norteamérica para permitir que el Estado Mexicano se fortaleciera un poco frente al avance del nazismo y comunismo que fácilmente terminarían por cooptarlo para convertirlo en un pivote de ataque contra Estados Unidos. México es el patio trasero estadounidense, pero si el Imperio Yankee no lo resguarda en forma correcta, entonces, los ladrones y sus enemigos pueden llegar a robar lo más valioso del hogar. El cardenismo tuvo una lectura adecuada de la situación internacional y coincidió con los
grandes enemigos del Estado Mexicano: Estados Unidos y la Santa Sede, para fortalecer la presencia del gobierno mexicano e inhibir la presencia de fuerzas radicales mayores que estuvieron a punto de cambiar el destino de la humanidad para siempre.
Además de los grandes enemigos de EU, China, Rusia, Irán, Alemania, etc. Ahora los narcotraficantes están en la sala de los hogares estadounidenses. Las ciudades, calles, escuelas y niños son el objetivo de los cárteles mafiosos que actúan sin control y sin moral alguna. Norteamérica también está sicilianizándose o, mejor dicho, entijuanándose. El más terrible enemigo ya es su vecino -como en esposas desesperadas-.
Quizá por ello, ahora se fortalece una visión estatocéntrica en México que ayude a regular la emigración y el trasiego de drogas, ¿Habrá tiempo? Los narcotraficantes y sus aliados neoliberales -dentro de los cuales había grupos fundamentalistas- se están radicalizando hasta el extremismo terrorista -como los talibanes del INE- y México, el estado mexicano, necesita una gran cantidad de armas y recursos económicos para poner orden en el país.
El General Lázaro Cárdenas aprovechó de forma más que amplia la coyuntura internacional que obligó a Estados Unidos para brindarle Carta Blanca en los procesos modernizadores de México. No obstante, el cardenismo tuvo oscuras sombras que, a la institucionalización del PRI-sistema, se convirtieron en pecados capitales. Si el cardenismo, con todo y sus grandes proyectos fue una sombra, Morena va en la ruta de ser una noche plena.
Morena no comprende que el piloto del mundo -los Estados Unidos- están borrachos, drogados, quebrados y frustrados -como en esposas desesperadas-. Más que el apoyo popular hacia Morena en nuestro país, es el paréntesis de la paradoja geopolítica estadounidense lo que permite un amplio margen de acción para recuperar la nación, reconstruir el estado e institucionalizarlo.
El aletargamiento de los Estados Unidos se acaba, y así el tiempo se agota para Morena. Un sexenio le permitió al General Lázaro Cárdenas construir una época, a López Obrador el tiempo lo congeló y no parece que su facción o partido consigan modificar o transformar de verdad a México.
Los talibanes narco neoliberales se volverán intrascendentes si el mundo se hace multipolar, pero si EU se recupera -como todo parece indicarlo- apuestan por un narcogobierno burocrático tecnocrático militar que gobierna la mayor parte del territorio nacional -como en Colombia- y con el que Morena, equivocadamente, ha coexistido a lo largo del sexenio. El pragmatismo que desarrolla Morena en varias entidades para admitir caciques, narcotraficantes, empresarios monopolistas y ultraderecha, fue la ruta que tomaron PRI y PAN -incluso el PRD- para destruirse. Morena quiere imitar la etapa cardenista, pero su nacionalismo deja mucho que desear en comparación con el que estructuró el Gral. Lázaro Cárdenas. Muchos candidatos y militantes de Morena no tienen ninguna diferencia con García Luna, ¿Qué esperan para marcar en verdad la diferencia si sólo están admitiendo tránsfugas y no establecen un sistema de gobernabilidad? ¿También serán una caricatura como el Echeverrismo? La mayor parte de los municipios en el país es gobernada por caciques narcotraficantes y huachicoleros que consolidaron su poder gracias al modelo neoliberal ¿También el presidente López Obrador amarrará las manos del Ejército Mexicano para que algún día le encuentren su García Luna y María Amparo Cassar?
La desatención de Estados Unidos hacia México, como se ha señalado en otros estudios, va a marcar el surgimiento de la Mexamérica Narconeoliberal Darwinista que fragmentará la Unión
Americana. El sur de los EU y el norte de México ya definen esta realidad. Pero el costo es la extinción de ambos territorios en un país que terminará por destruir Estados Unidos y México.
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