Puede parecer que quienes escriben lo hacen desde la soledad; que no responden a ningún ejemplo, no tienen ninguna influencia, que son libres. Eso no es común ni muy cierto porque las mas de las veces las personas que escriben responden a estímulos que los rodean, a otros autores y escuelas.
Me quiero referir a la literatura contemporánea en México. Lo hago por supuesto con todo comedimiento porque lo que conozco es escaso. Leemos poco y cuando lo hacemos vamos a lo conocido.
A partir de los años 50 de gestan las corrientes actuales: aparece la novela mexicana moderna; se la atribuye a Agustín Yañez, con su obra Al filo del agua, y es en ese grupo que surgen Carlos Fuentes, José Emilio Pacheco y otros autores. Años adelante, en los 70’s aparece la literatura de la onda, representada en la obra de Gustavo Sainz, José Agustín y Parmenides García Saldaña. En esta generación, el estilo fue retador y contestatario apartándose de los esquemas anteriores. El idioma coloquial es creado y recreado y las temáticas se sitúan en un México juvenil urbano situado en la ciudad de México y lugares cercanos.
Años después han surgido otras generaciones que esperan ser descubiertas. Una de ellas es la llamada “generación del crack”, llamada así por representar fonéticamente una ruptura y no por consumir enervantes sintéticos. Se trata de un grupo de literatos jóvenes que publican desde los años 90. Entre ellos se encuentra Ignacio Padilla, Jorge Volpi, Eloy Urroz, Ricardo Chávez Castañeda, Pedro Ángel Palou y Vicente Herrasti.
En literatura se habla de generaciones si bien el término no tiene una dimensión biológica. Se trata de grupos de escritores que coinciden tanto en el tiempo como en aspectos mucho más complejos. En la literatura española nos son familiares dos: la generación del 98, en relación con el año 1898, un tiempo de replanteamiento nacional en España luego de perder la guerra con los Estados Unidos. Los autores que se destacan en este tiempo son José Martínez Ruiz “Azorín”, Miguel de Unamuno y Antonio Machado, autor de la poesía tan conocida que se llama Cantares. Otra de las generaciones españolas que estudiamos es la del 27 de la que forman parte escritores conocidos como García Lorca y Rafael Alberti.
La literatura de cada país tiene sus generaciones; México no es la excepción. A lo largo de nuestra historia, los escritores se han agrupado en escuelas y corrientes, a veces enfrentadas con encono o bien como una reacción a modelos estéticos que se consideran gastados. Tal es el caso de escritores que se han opuesto a la influencia de autores como García Marquez o bien a expresiones literarias que se pueden considerar ligeras.
Hay en internet muchos recursos. Uno que recomiendo con amplitud es la página descargacultura.unam.mx . En este sitio se pueden escuchar en la voz de los autores, cuentos, poesía y otra manifestaciones literarias no solo de México y no solo actuales.
Es de destacarse que este sitio cuenta con una amplia sección de poesía en lenguas indígenas, entre otras náhuatl, maya, tzotzil, mazateco, zapoteco, otomí y zoque.
Para escribir es imprescindible leer, nutrirse y luego, con toda la fuerza, con todo el coraje, romper los moldes. Crear, en una palabra.
Antonio Canchola Castro
canchol@prodigy.net.mx