top of page

El Gusano de Seda

Para mi, la lectura del libro “El Gusano de Seda” (Robert Galbraith; 2014) se ha convertido en una pesadilla. Desde noviembre del año pasado lo empecé a leer, y todavía no lo termino. No es que sea un libro aburrido, al contrario, es muy entretenido, pero sabiendo quien lo escribió y el tema que trata, lo hace un libro complicado y abierto a varias interpretaciones.

En primer término se trata de una novela policiaca donde un detective pintoresco, Cormoran Strike, trata de resolver el asesinato de un autor casi desconocido. Se puede leer el libro de esa manera sin ningún problema, pero el autor Robert Galbraith es el pseudónimo para la escritora J.K. Rowling, mundialmente famosa por la serie de Harry Potter. De esta manera, los comentarios sobre las editoras contemporáneas son muy importantes. ¿Quién más que Rowling puede tener acceso al proceso de escribir, vender, y comercializar un libro en esta época? Así que el “Gusano de Seda” termina por ser una crítica a lo que significa el libro en nuestra época.

La víctima del crimen, excepcionalmente violento, es un escritor de nombre Owen Quine. El motivo del crimen es que Quine escribió un libro donde habla la verdad sobre otros escritores y su casa editorial. Evidentemente, Rowling intenta aclarar la situación actual de las casas publicitarias y lo hace desde un punto de vista inusual: desde alguien que esta por encima de muchos escritores y que además, no tiene nada que perder. Si sus libros después de Harry Potter no se vendieran, no tendría la menor importancia, puesto que su fortuna esta asegurada.

Pero por si esto fuera poco, la seria del detective Cormoran ya cuenta con tres libros y se ha vendido como pan caliente. Nos encontramos ante una de las más populares y reconocidas escritoras en nuestros tiempos. Ninguna otra escritora ha contado con el éxito literario los últimos 50 años, y además es considerada como una buena escritora.

Es aquí donde el libro puede ser leído como una guía a la publicación del libro.

Quizá cuando uno de los personajes, el editor Daniel Chard, explica:

“…el mundo del libro ha cambiado demasiado rápido en los últimos años y cuenta con nuevos retos, pero una cosa si es segura, hoy como hace un siglo: El contenido es el Rey.” (Traducción libre)

La observación viene al caso porque las tendencias publicitarias se han apartado de esta premisa. Se pueden observar libros que son éxitos seguros por la forma en que son comercializados. Inclusive, algunos se publican después de contratos de cine, o de televisión, que no tienen nada que ver con la creación literaria.

De igual manera, ya no es raro que un libre se publique porque es famoso en las redes sociales o por su venta digital. Pero las ventas digitales no quiere decir que el libro sea leído. En mi teléfono tengo casi 15 libros, la mayoría gratis, y solo estoy leyendo “El Gusano de Seda” (que por cierto, compré el impreso también). Y poco a poco, un libro sin contenido pasa de ser moda y a ser olvidado en poco tiempo.

El título del libro se explica cuando la esposa del autor asesinado habla de cómo para hacer la seda, el capullo es inmerso en agua caliente, matando al gusano adentro

antes de su transformación. De esta forma, la seda no sufre daño alguno. Esta imagen se usa para describir a los autores y la relación con su casa publicitaria. Al autor se le ve como un objeto de producción y no importa si lo matan antes de que logre madurar siempre y cuando se pueda vender lo que escribe.

Se podría decir que la autora no tiene la intención de comentar sobre el mundo publicitario, pero la investigación del crimen, es la un cuestionamiento personal sobre lo que significa ser autor en nuestros días.

(continuara)

bottom of page